Manuel de la Rosa Hernández | Orlando Gutiérrez había saltado a la palestra nacional e internacional hace unos meses por haber ejercido como portavoz de la huelga general indefinida lanzada por la Central Obrera Bolviana y sus organizaciones y federaciones afines, entre ellas su sindicato, la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (FSTMB), de la que ha sido secretario ejecutivo desde 2017 hasta ahora. Orlando Gutiérrez también salió a dar la cara para explicar las razones de la desconvocatoria.
Este 28 de octubre ha fallecido, tras haber sido agredido por un grupo de corte fascista el pasado 21 de octubre. Este vil crimen ha conmocionado a toda Bolivia, la vinculación de su muerte con la aplastante victoria de la izquierda, representada en la formula presidencial Luis Lucho Arce-David Choquehuanca y encuadrada en el MAS-IPSP, está fuera de toda duda.
En el año 1995 empezaba a trabajar en la mina con 11 años, donde fue forjando su conciencia de clase y un reconocido liderazgo a sus 36 años, en el veterano sindicalismo minero boliviano, ganado a pulso. Era el menor de cinco hermanos, también dedicados a la actividad minera.
Había nacido en 1984 en una localidad minera de La Paz, creció con una infancia y adolescencia vinculada a la mina, en el seno de una familia pobre y con pocos recursos, del que era el menor de cuatro hermanos. Fue ascendiendo en las profesiones en las que se encuadra la función profesional minera.
Paso a paso fue creciendo su compromiso colectivo, en 2007, con 23 años ya empieza a tomar responsabilidad dirigente a nivel local, siendo nombrado secretario ejecutivo de su sindicato en ese ámbito en la zona de Colquiri,
Luego sería elegido en el 2015 como el nuevo secretario ejecutivo de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (FSTMB), cargo que ejercía hasta ahora.
En una entrevista en el 2018 para un boletín sindical le preguntaron cómo se definía políticamente, a lo que respondió “Soy militante de la clase obrera porque soy un minero orgulloso de mis raíces y voy a seguir peleando por los derechos e intereses de mi clase, esos son mis principios político-ideológicos. Mis principios guardan relación con las Tesis de Pulacayo, que es contar con un gobierno socialista, comunitario, de los obreros, por eso hemos creado este proceso de cambio que no es ni de un partido político ni de una persona.”
https://web.archive.org/web/20041221033546/http://www.pt.org.uy/textos/temas/pulacayo.htm
El pasado 21 de octubre de 2020, recién culminado el proceso de elecciones nacionales en Bolivia y la confirmación del triunfo del MAS, el dirigente ejecutivo de la federación minera nacional boliviana fue brutalmente golpeado cuando volvía a su casa. Orlando Gutiérrez había participado de manera activa en la campaña del MAS con miras a las elecciones del domingo 18 de octubre.
Nadesha Guevara, abogada y amiga dio conocer a la opinión pública, que desde el mes de agosto, Orlando Gutiérrez ya estaba pidiendo medidas cautelares a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) debido a las reiteradas amenazas de muerte recibidas, pero su petición no tuvo éxito y siquiera fue atendida. Tras ser ingresado en una clínica falleció en la madrugada del 28 por la gravedad de las heridas recibidas.
La repercusión de esta muerte ha sido tremenda en la sociedad boliviana, a nivel de las organizaciones sociales, encabezadas por la COB, que exigen el esclarecimiento de los hechos.
Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (FSTMB) se declaró en duelo por 90 días y este jueves realizará un paro nacional de todo el sector, mientras que, delegaciones sindicales de todo el país asistirán al entierro de Gutiérrez que se realizará en la ciudad de Oruro.
El portavoz de la Central Obrero Boliviana (COB), Juan Carlos Huarachi, exigió al Ministerio Público que investigue el asesinato del secretario Ejecutivo de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros, Orlando Gutiérrez Luna. Juan Carlos Huarachi solicitó que «se hagan las investigaciones, se esclarezcan los actos sufridos por nuestro hermano (Orlando Gutiérrez), vamos a pedir el informe como corresponde». El dirigente campesino Juan Carlos Jiménez, ha declarado que “el hermano fue atacado y las autoridades no se han pronunciado al respecto.”
El fallecimiento de este dirigente se da en medio del descontento manifestado por ultraderechistas que en desacuerdo con el aplastante resultado electoral tocan a las puertas de algunos cuarteles solicitando que las FF.AA. tomen el poder para “salvar la democracia”. En la misma línea, el comité cívico de Santa Cruz, a la cabeza de Rómulo Calvo, acaba de presentar un Amparo Constitucional pidiendo que se suspenda la toma de posesión de la dupla presidencial del MAS, Luis Arce Catacora y David Choquehuanca, hasta que se culmine con una auditoría que demuestre que no hubo fraude.
El resultado electoral es inapelable, porque los resultados superan en muchos puntos los candidatos de la derecha, porque el resultado superó el 55´4 % de los votos emitidos, porque había observadores internacionales y porque hasta el propio gobierno tuvo que reconocer la victoria sin tacha de la candidatura del MAS. Toca mantenerse alerta, preparando la vuelta del MAS al gobierno.
Esas minorías se han vengado con su muerte de la contundencia y claridad política y conciencia obrera y popular con la que Orlando Gutiérrez enfrentó sus planes y peleó por los derechos y por las libertades de la mayoría obrera y popular. Estos días el pueblo de Bolivia ha perdido a un gran dirigente obrero. Pero Orlando Gutiérrez permanecerá en la memoria colectiva como ejemplo de entrega, conciencia y compromiso con la clase obrera y con el pueblo de Bolivia. Nos quedamos con una frase suya: “La fuerza del pueblo no la van a callar.”
Manuel de la Rosa Hernández es militante de Anticapitalistas.
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