Redacción | Más de cuarenta trabajadoras del sector del hogar y los cuidados se reunieron este pasado sábado 11 de septiembre en la ciudad de Vigo. Se consolidan así los primeros paso del Sindicato de Trabajadoras del Hogar y los Cuidados (SINTRAHOCU) en la ciudad gallega.

Dados los controles sanitarios del aforo, se tuvo que delimitar la asistencia, lo cual demuestra las ganas de las trabajadoras y trabajadores del hogar de participar en el que ha sido el primer encuentro de SINTRAHOCU fuera de Madrid. Una primera reunión para clarificar los primeros pasos de un sindicato hecho por y para las protagonistas del trabajo del hogar y los cuidados. La explotación laboral a la que se ven sometidas las protagonistas y el proceso migratorio vivido marcaron el rumbo de la sesión. Diferentes orígenes, principalmente de América Latina, se dieron cita con un mismo objetivo: defender sus derechos y pelear por el reconocimiento de una labor cada día más imprescindible.

El encuentro permitió ir resolviendo dudas comunes en cuanto a los aspectos legales que afrontan diariamente las trabajadoras y trabajadores del hogar y los cuidados. La situación de desamparo legal e institucional que enfrentan les somete a la impunidad total de empleadores que se saben súmamente superiores en esta relación laboral. La condición de irregularidad administrativa agrava dicha situación.

Y es que la crisis sanitaria abierta por el Covid-19 hizo evidente una nueva forma de explotación que el capitalismo va consolidando. Según fuentes oficiales del Estado más de 600.000 personas ejercen en el Estado español como trabajadoras del hogar y los cuidados, de las cuales se calcula que prácticamente la mitad no cuentan con un contrato de trabajo, ni están dadas de alta en la Seguridad Social. Lo cual, además de negar gran parte de los pocos derechos con los que cuentan, invisibiliza su labor. Aquella máxima que las instituciones repitieron hasta el hartazgo desde el inicio de los confinamientos exigiendo “quedarse en casa” era completamente imposible para quienes ocupan este sector. Pues se vieron obligadas poner su vida en riesgo desde que salían de casa, tomaban el transporte público y acudían a los hogares donde trabajan, salían hacer la compra y los recados para sus empleadores. A pesar de esta situación, la cobertura del Gobierno formado por le PSOE y Unidas Podemos quedó, una vez más, lejos de lo prometido. La regulación puesta en marcha el pasado año, que establece el salario mínimo interprofesional (SMI) para la jornada completa, sigue sin regular en este caso el horario de esa “jornada completa”, la cual suele extenderse más allá de las 10 horas de trabajo diarias. La ausencia de paro, una completa cobertura ante accidentes laborales y la ausencia total de inspecciones de trabajo siguen marcando el día a día de miles de trabajadoras. Por ello, es alarmante que este Gobierno siga sin ratificar el Convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

https://twitter.com/sintrahocu/status/1385169871210696707

Además de los aspectos directamente relacionados con los aspectos legales de esta labor, la sesión también permitió sacar a la luz los otros dos frentes centrales en la acción de SINTRAHOCU: la propia autoorganización de las trabajadoras y la lucha por los derechos sociales y políticos. La combinación del movimiento migratorio, con el desarrollo de un empleo individualizado, impone el aislamiento para muchas de las trabajadoras que no cuentan con una red familiar o amistosa con la que compartir su situación. Debilitando así, más aún la potencia de lucha en defensa de sus condiciones laborales y vitales. Es por ello que en la reunión se pusieron en marcha ideas para que SINTRAHOCU sea también un espacio de socialización de los autocuidados, de ocio y disfrute entre trabajadoras y trabajadores. “Es el momento de que se reconozca que nuestra labor es esencial” se comentó en varias ocasiones en la reunión. El papel de las tareas del hogar y los cuidados se demuestran imprescindibles para el desarrollo del mercado en concreto y del sistema capitalista en general. Por lo cual las trabajadoras del hogar y los cuidados caminan decididas a exigir los derechos que les corresponden.

Recuerda que si quieres formar parte de SINTRAHOCU puedes inscribirte a través del siguiente enlace: cutt.ly/nxOxrWh

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